Vivimos en una época de excesos de todo tipo, alimenticios, monetarios, de acaparar todo tipo de vienes sin medida y de tener la casa más grande de nuestro vecindario.
Minicasas
Pues eso, como tendencia, parece que tiene los días contados, ¿porque? Sencillo, toda una nueva generación de diseñadores respaldada por un buen nutrido grupo de personas que empiezan a entender la vida de otra manera.
El concepto MINICASA, algo muy de moda en estados unidos, por la irrupción de las casas rodantes, en Europa llevan mucho más recorrido, allí un apartamento de 32 metros cuadrados, según en la gran ciudad que estés, es un lujo.
Por ello el diseño de un espacio reducido ha de ser consecuente con el presupuesto, pero también con la usabilidad y en muchos casos las soluciones brillantes para ahorrar espacio, pero no perder, ni comodidad, ni funcionalidad.
Deshacerse de cosas
Pero todo empieza por uno mismo, no podremos ni habitar, ni cohabitar con la casa, si primero no nos liberamos de todo lo superfluo que se ha acaparado durante la vida.
A su vez abrazaremos que (siendo dos personas en casa) con dos tenedores, dos cuchillos, dos platos y dos vasos, tenemos suficiente para nuestra nueva forma de vida.
La decoración corre la misma suerte, la sobriedad es necesario, para evitar recargar un espacio mínimo y así no agobiarnos en poco tiempo.
Los grandes formatos, permiten ocupar con una o dos obras, las paredes, dando sensación de más amplitud con menos elementos.
El contraste entre claros y oscuros, nos ayudara a delimitar espacios de forma eficiente, sin necesidad de barreras físicas.
Conclusiones
Como siempre, recomiendo consultar con un profesional, a veces se nos pueden escapar soluciones arquitectónicas que nos pueden solucionar muchos problemas a posteriori.
Porque si una cosa esta clara, la preparación, tanto personal como técnica, para abrazar a una mini-casa es fundamental.